Recuerdo mucho cuando ayudada a mi padre a hacer trabajos en la casa, lo que no me resultaba totalmente divertido por lo severo que era él, pero de lo que aprendí mucho. Él insistía en que para que las cosas nos salieran como queríamos, debíamos pensar bien lo que íbamos a hacer, luego medir bien, medir dos veces decía, para evitar que tuviésemos que